Las operaciones de las aerolíneas sufrieron un nuevo revés el 23 de junio, con varias compañías cancelando o redirigiendo vuelos, debido a la intensificación del conflicto en Oriente Medio.
Varios países de la región cerraron abruptamente su espacio aéreo tras el ataque de Irán a una base militar estadounidense en Qatar, en respuesta al bombardeo de Washington a varios sitios nucleares clave en Irán el día anterior. Esta medida afectó las operaciones en importantes centros de Oriente Medio, como Doha y Dubái.
Qatar fue el país más afectado, cerrando temporalmente su espacio aéreo tras el ataque, lo que obligó a la aerolínea nacional Qatar Airways a suspender todas sus operaciones a última hora del 23 de junio. Según informes, más de 20 vuelos de Qatar Airways con destino a Doha fueron desviados durante el breve cierre del espacio aéreo.
Horas después, la aerolínea miembro de Oneworld, que representa la mayor parte del tráfico de pasajeros en el aeropuerto internacional de Hamad en Doha, confirmó que estaba reanudando los vuelos tras la reapertura del espacio aéreo qatarí. “A medida que reanudamos las operaciones, prevemos retrasos significativos en nuestro cronograma de vuelos”, señaló la aerolínea.
En Dubái, Emirates, el principal operador, confirmó el 23 de junio que “varios” de sus vuelos fueron redirigidos, aunque no hubo desvíos. “Tras una evaluación exhaustiva de riesgos, Emirates continuará operando vuelos según lo programado, utilizando rutas de vuelo alejadas de las zonas de conflicto”, afirmó la aerolínea.
Por su parte, Etihad Airways, con base en Abu Dabi, canceló varios vuelos a otros países de Oriente Medio, incluidos Arabia Saudita y Kuwait, debido a “interrupciones” en sus servicios. “Esta sigue siendo una situación muy dinámica, y podrían ocurrir más cambios o interrupciones con poca antelación”, indicó la aerolínea.
Las aerolíneas fuera de Oriente Medio también se vieron cada vez más afectadas por la crisis, que ya ha llevado a las compañías a evitar el espacio aéreo iraní desde el 13 de junio, cuando Israel comenzó sus ataques contra Irán.
Air India anunció que suspenderá todos sus vuelos a Oriente Medio, Europa y la costa este de Norteamérica hasta nuevo aviso. “Nuestros vuelos con destino a la India desde Norteamérica están regresando a sus puntos de origen, y otros están siendo desviados a la India o redirigidos para evitar el espacio aéreo cerrado”, explicó la aerolínea.
IndiGo suspendió sus vuelos a varias ciudades de Oriente Medio hasta principios del 24 de junio, mientras que SpiceJet advirtió sobre posibles cancelaciones en los próximos días.
En Asia, Singapore Airlines canceló los vuelos entre Singapur y Dubái hasta el 24 de junio por preocupaciones de seguridad.
Qantas, que opera vuelos directos entre Perth y Europa, desvió dos vuelos el 23 de junio tras el cierre del espacio aéreo qatarí: el vuelo Perth-Londres fue desviado a Singapur, mientras que los vuelos a París regresaron a Perth. La aerolínea australiana señaló que espera que algunos de sus vuelos europeos operen “según lo planeado” el 24 de junio, incluidos los trayectos de Sídney a Londres (vía Singapur), Perth-Roma y Perth-Londres.
En Europa, aerolíneas como Iberia, Finnair y el grupo Air France-KLM suspendieron operaciones a Doha, Dubái o ambos, también por motivos de seguridad.
La creciente crisis en Oriente Medio incrementa la incertidumbre operativa para las aerolíneas, especialmente aquellas con vuelos entre Europa y Asia. Con los espacios aéreos de Rusia y Ucrania cerrados por más de tres años debido a la guerra en curso, las aerolíneas han tenido que redirigir sus rutas a través de Oriente Medio. Sin embargo, las opciones de rutas disponibles se están reduciendo cada vez más en medio del creciente conflicto en los últimos meses.
